Esto me parece algo muy importante para que te respetes cada vez más.
Y que otros también lo hagan.
Te cuento:
El otro día una persona quería darle un beso a mi hijo.
Y él no quería recibirlo.
Hasta ahí todo en orden, suele pasar.
El tema es que alguna voz escuchaba yo por ahí:
– Venga, que es solo un besito.
No sé si era una voz interna o de fuera.
No sé si era una parte de mí que quería quedar bien con la besadora, o si alguien realmente lo dijo.
En cualquier caso, me di cuenta de que esa voz me recordaba que muchos de nosotros hemos pasado por ahí.
Por vernos obligados por otros a hacer algo que no queremos.
Sin contar con nosotros.
Ahora un besito, mañana otra cosita, y así.
Y si esto nos pasa desde niños, cuando somos grandes posiblemente veamos normal tener que hacer algo “porque toca”.
🔔CÓMO ME FUNCIONA A MÍ
Cuando me veo en una situación en la que percibo incomodidad, porque interpreto que alguien me está obligando a hacer algo que no quiero, esto es lo que hago:
- Parar y tomar conciencia de lo que está pasando
- Darme cuenta que lo estoy haciendo porque creo que “tengo que hacerlo”
- Comprender que así lo aprendí, que por eso lo veo “normal”.
- Y preguntarme si es lo que quiero hacer, en coherencia con la adulta madura que soy ahora y no con la niña indefensa que fui.
Esto tiene mucha, mucha más profundidad…
Y no lo vivo desde pobrecita de mí, mira lo que me hicieron cuando era pequeña y mira como me siguen manipulando ahora…
Lo vivo con la responsabilidad de este momento.
Sin arrastrar el pasado, sin confundir lo que fue con lo que es.
💡MOMENTO AUTORREFERENTE
Puede que a veces te pase esta situación, y no te des cuenta que tu comportamiento puede venir de ese aprendizaje en tu infancia.
O sea, no ves que lo estás haciendo porque te obligas a ello, o te obligan otros.
Por ejemplo:
- cuando te ves obligada a trabajar de más en tu trabajo sin decidirlo o hacer tareas que no quieres.
- cuando te parece que tienes que tener una relación sexual con alguien, sin apetecerte
- cuando sientes que tienes que cuidar a ese familiar enfermo pero que es lo menos que te gustaría estar haciendo.
- cuando te invitan a algún evento social o familiar pero que pasarías olímpicamente de ello
- cuando te obligas a ti misma a actuar con los principios éticos o morales que aprendiste pero que realmente no son los tuyos.
¿Lo ves? ¿Te pasa?
Y una nota al margen: Si tienes hijos, observa si lo estás obligando a algo, aunque sea solo a
darle un besito a esa chica tan maja que te cae a ti tan bien.
Si quieres tener más claves para el auto respeto y tener una vida más satisfactoria, deja tu correo debajo y te enviaré mis emails donde, entre otras cosas, te hablo de esto.
Un abrazo,
Naylín