Aunque no lo creas de un primer vistazo, lo que te muestro hoy te puede ayudar a tener mucho mejores relaciones y de más calidad, siendo auténticamente tú.
«La meditación no es para los pusilánimes ni para quienes se han acostumbrado a negar los anhelos más profundos de su corazón»
Esta frase de arriba no me la he inventado.
Es la que inicia el folleto del programa de entrenamiento de atención plena del Instituto Center for Mindfulness in Medicine, Health Care, and Society a profesionales de salud y líderes del mundo empresarial.
¿El propósito?
Lo tienen claro:
Desalentar a todas las personas que no están en el punto de aprovechar lo que ellos ofrecen.
¿Y eso qué tiene que ver contigo?
Bueno, no sé si te pasa.
Pero por lo general, veo gente que va por la vida queriendo caer bien.
Que todos lo quieran.
Diciendo que sí a todo.
Sin mostrarse tal y como es.
Sin poner límites sanos.
Y se va creando un personaje encima de otro y de otro…
Y eso crea sufrimiento y relaciones insatisfactorias, porque no se basan en una conexión genuina.
🔔CÓMO ME FUNCIONA A MÍ
Por encima de todo, quiero conocerme.
Y para conocerme, me tengo que mostrar tal cual soy.
Con lo que le gusta al otro y lo que no.
Con lo que me gusta de mí y lo que no.
Y así me conozco yo y el otro me puede también conocer y decidir.
Decidir si quiere ser mi pareja, mi amiga, mi cliente.
No de mi personaje ficticio, sino de esa parte mía más original.
💡MOMENTO AUTORREFERENTE
¿Estás buscando la aprobación de todos?
¿Cómo te sientes con ello?
Mira, si yo escribiera a los suscriptores de mi lista para agradar a todos, tuvieran menos recursos para su evolución.
Porque andaría de puntillas para que a todos les gustara.
Y no busco aplausos.
Quiero personas que hayan llegado a un tope, y que se hayan dado cuenta que hay más y quieren ir a por ello. Comprometidas.
Si eres uno de ellos, deja tu email debajo y me encargaré del resto.
Un abrazo,
Naylín